El actual campeón del certamen apostó por un sólido dispositivo defensivo y aprovechó un balón parado, a la mejor usanza del Mundial, para llevarse la victoria 1-0 en un partido parejo. La vuelta será el próximo martes 30. Acá el detalle.

Por Laurencio Valderrama Poblete / Fotos: Conmebol.

River Plate no pudo y perdió su invicto ante Gremio, que revalidó su oficio como actual campeón de la Copa Libertadores y se llevó la victoria por la cuenta mínima en Buenos Aires, por la ida de las semifinales del certamen.

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Ante un Estadio Monumental repleto que homenajeó y ovacionó al técnico Marcelo Gallardo, se vio un partido parejo donde el cuadro argentino presionó y buscó por todos lados, pero se encontró con un ordenado dispositivo defensivo del cuadro de Renato Portaluppi.

Por ende, no hubo demasiadas ocasiones claras: a los 24′ vino la única de la visita con un remate de Cicero que el portero Armani envió al córner, mientras que el local -ante la dura defensa- eligió remates de media distancia, donde Palacios exigió en dos ocasiones al portero Marcelo Grohe con potentes disparos. Buen partido del colombiano Juan Fernando Quintero, tomando la manija del mediocampo.

En el complemento River estuvo cerca de la apertura del marcador, pero perdonó en un momento clave: córner desde la izquierda, cortina de Montiel que le hizo perder la marca al argentino Kannemann, pero Maidana elevó su cabezazo en una posición ideal.

En cambio, Gremio sí aprovechó la pelota parada y anotó la única cifra del partido con certero testazo de Michel, que se anticipó a los centrales y aplicó golpé de cabeza en el primer palo (57′), tras medido centro de Allison.

Gallardo buscó un revulsivo para su equipo con los ingresos de Pratto (por Scocco); de Nacho Fernández (por Palacios) y de Enzo Pérez (por Ponzio que casi se va expulsado). El equipo argentino siguió luchando contra un muro y sólo tuvo un remate elevado de Quintero y un tiro libre del mismo colombiano que Marcelo Grohe envió al córner.

Tras el pitazo final del peruano Víctor Hugo Carrillo -de regular cometido- muchos jugadores encabezados por Pinola se fueron contra el juez, pero Gallardo estuvo atento para separar airadamente y evitar una expulsión que habría sido fatal para la vuelta, que se disputará el próximo martes 30 en Porto Alegre.

Gremio logró su cuarto triunfo seguido en el certamen y todos contra argentinos, tras vencer en la vuelta de octavos a Estudiantes (2-1) y luego en las victorias sobre Atlético Tucumán (0-2 y 4-0). Además, anotó su noveno gol de pelota parada en el certamen.

River, en cambio, perdió su invicto en el certamen dado que tenía cinco victorias y cinco empates, pero irá con la ilusión de dar vuelta la llave tal como lo hiciera alguna vez ante Cruzeiro en Belo Horizonte (edición 2015).

Por último, el ganador de esta llave se medirá ante el vencedor de la serie entre Boca y Palmeiras, a iniciarse este miércoles en La Bombonera, con arbitraje del chileno Roberto Tobar.

RS/lv